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Monte Alto, nuestro barrio, empieza a cruzar fronteras. Ya presumíamos de ser uno de los distritos más peculiares de A Coruña, pero ahora, GoEuro, comparador de viajes, lo ha escogido como uno de los barrios más especiales de nuestro país. Podemos achacar con orgullo la labor que con esfuerzo y determinación han llevado a cabo las asociaciones de vecinos y comerciantes del lugar, así como la comunidad vecinal, que año tras año ha ido renovando infraestructuras y luchando por un barrio mejor.
Pero más allá de todos esos avances y buenas intenciones que obviamente han dado su fruto, ¿qué es lo que realmente hace especial a Monte Alto? Si echamos un poco la vista atrás, nos encontraremos con que hace diez o quince años era un espacio muy humilde que, no obstante, gozaba de una característica que ya le hacía especial. Y es que el hecho de estar situado en una zona elevada de la ciudad le concede unas vistas excepcionales. Partiendo de esa base y gracias a las iniciativas que hemos apuntado anteriormente, el barrio fue renovándose y adquiriendo un color singular y atractivo. Un tono que, de manera paulatina, fue trayendo un cambio de ambiente, hecho que facilitó que los jóvenes lo eligieran como prioridad para mudarse a vivir.
Hoy en día, y gracias a que está repleto de juventud, se ha convertido en una zona de marcha, sobre todo para el ambiente alternativo. Han abierto nuevos bares y pubs que mezclan muy bien con los que llevan allí toda la vida, como O Patachín. Las calles de Orillamar y San Juan son las principales arterias de este factor hipster que tanta vida le confiere a Monte Alto. Del mismo modo, es un barrio orientado al mar y que, por tanto, está rodeado de playas. En ese aspecto, las que se llevan la palma son las Lapas y la de San Amaro.
También por sus festividades destaca Monte Alto. Sobre todo por su carnaval, una celebración donde se realiza la popular tradición de los choqueiros, en que se elige al disfraz más alocado y destartalado y se le premia con un buen pellizco de dinero al igual que incluyendo su nombre en la Rua San José. Otra evento destacable es la que se produce con motivo de las hogueras de San Juan, que congregan a montones de asistentes en las diferentes playas que lo integran.
Como apuntes culturales, sin duda, hay que quedarse con la torre de Hércules, un faro romano que es patrimonio de la Unesco desde 2009, junto al que se erige el Aquarium Finisterrae, un gran espacio que rinde culto a la biología marina y la oceanografía. Muy interesante también el Domus, un museo temático sobre el cuerpo humano el cual también se encuentra en el barrio.
En definitiva y como guinda, comentar que Monte Alto es de esos barrios que mantienen ese toque distintivo con aire auténtico, manteniendo hechos tan simples como el de que los vecinos se sigan saludando por la calle y que sus comercios sigan siendo singulares y tradicionales como antaño.
